En una subasta popular que coincide con lo siniestro y colorido de un circo de fenómenos, una pareja adopta niños a cambio de sus pertenencias. Los niños allí adquiridos, generalmente mutilados, se encuentran en su nuevo hogar con el fin de prepararlos para el acceso al programa de educación peronista que se imparte en sólo 10 institutos estatales.